En la clausura del curso de verano “Nuevas Fronteras en la Igualdad de Oportunidades: escuela para la igualdad”, organizada por la Universidad de Santiago de Compostela y el municipio de Lalín, Marta González recordó que la mejor arma para lograr erradicar la violencia de género es alcanzar la igualdad entre hombres y mujeres a través de la educación, que debe tener patrones comunes en la escuela, en la familia, en el entorno de iguales o en las influencias recibidas a través de los medios de comunicación”, y que recordó que “cambiar la sociedad tiene que ser cosa de todos y de todas”, no es sólo un asunto de las mujeres.
La educación de las nuevas generaciones “no es sólo un problema de la escuela”, toda vez que los patrones de comportamiento de los niños y de las niñas vienen en gran parte del núcleo familiar; de ahí “la importancia de la conciliación y la corresponsabilidad, la necesidad imperiosa de contar con tiempo suficiente para dedicar a la labor, irrenunciable, de las madres y de los padres como educadores de nuestros hijos e hijas ”.
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La educación de las nuevas generaciones “no es sólo un problema de la escuela”, toda vez que los patrones de comportamiento de los niños y de las niñas vienen en gran parte del núcleo familiar; de ahí “la importancia de la conciliación y la corresponsabilidad, la necesidad imperiosa de contar con tiempo suficiente para dedicar a la labor, irrenunciable, de las madres y de los padres como educadores de nuestros hijos e hijas ”.
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